Disturbios y altos niveles de crimenes continúan en varias ciudades

maquina-de-combate.com – El gobierno de Estados Unidos ha lanzado la denominada Operación LeGend para intentar amainar la ola de disturbios y altos niveles de criminalidad que aún persiste en varias ciudades del gigante norteamericano.

Las protestas iniciaron tras la muerte del afroamericano George Floyd en mayo pasado, cuando fue detenido por pasar un billete falsificado y supuestamente rehusarse a devolver el producto adquirido. La policía acudió al lugar pero al arrestar a Floyd lo acogotaron de tal manera que le fue muy complicado respirar, al punto que luego de aproximadamente ocho minutos y 45 segundos con las extremidades inferiores de tres policías en su cuerpo, falleció.

El incidente, un caso aislado, fue tomado como bandera de protesta contra el racismo y se multiplicaron las protestas en diferentes ciudades. Lamentablemente, los saqueos y violencias que acompañaron buena parte de las protestas han provocado más muerte y destrucción de propiedad pública y privada, dividiendo a la población en lugar de unirla.

En algunas ciudades, como por ejemplo Portland, en Oregon, las protestas han continuado por cerca de dos meses. En otras ciudades, se ha aprovechado la coyuntura que perjudica a las agencias policiales para desatar incrementados niveles de actos criminales. Inexplicablemente, salvo se le mire por el lado político, algunos alcaldes y hasta gobernadores han dejado ser a los protestantes, sin importarles mucho la seguridad ciudadana, el respeto a la labor policial y el respeto a la propiedad privada, pilares fundamentales en las democracias modernas.

El secretario interino de Homeland Security, Chad Wolf, comentó en una conferencia de prensa llevada a cabo la semana pasada sobre lo que viene ocurriendo en la ciudad de Portland, en relación a las acciones que se están tomando para solucionar tal situación. “En Portland, hemos visto casi dos meses de violentos y coordinados ataques por anarquistas contra la (sede de) Corte Federal y oficiales policiales que han jurado protegerla. En Chicago hemos visto un incremento sin precedentes en (cuanto a ) crimen contra conciudadanos. La misión del DHS en Portland es proteger la propiedad federal y a nuestros oficiales policiales. En Chicago, la misión es proteger al público contra crímenes violentos en las calles. Los líderes de estas grandes ciudades no deben apoyar este statu quo, ellos deben apoyar a (Estados Unidos de) América, deben condenar estos ataques violentos y deben trabajar con esta administración y este presidente para llevar ley y orden”.

Habida cuenta de la inactividad de algunas autoridades estatales y locales, el gobierno federal de Estados Unidos decidió ir en auxilio de aquellas ciudades que se están viendo afectadas por la violencia y ha lanzado la operación LeGend.

Sobre la iniciativa, el presidente Donald Trump sostuvo una conferencia de prensa el 22 de julio en la que comentó lo siguiente: “En semanas recientes, ha habido un movimiento radical para definanciar, desmantelar y disolver nuestros departamentos de policía. Políticos extremistas se han unido a la cruzada anti-policial y sin pausa han envilecido a nuestros héroes policiales. Al observa desde cualquier punto de vista, el esfuerzo para cerrar la policía en sus propias comunidades ha llevado a perturbadores explosiones de tiroteos, muertes, asesinatos y crímenes horrenda violencia. El derramamiento de sangre debe parar. Este desangramiento debe terminar”.

“Hoy, estoy anunciando un surgimiento de oficiales federales policiales en las comunidades americanas plagadas por crímenes violentos. Vamos a trabajar cada día para restaurar la seguridad pública, proteger a nuestros niños, y llevar a los perpetradores de actos violentos a la justicia. Lo hemos estado haciendo, y ustedes han visto lo que sucede alrededor del país. Recién hemos iniciado este proceso, y, francamente, no tenemos más opción que involucrarnos”.

El mes pasado, más de 300 personas fueron objetos de ataques con armas de fuego, un incremento del 277% en relación a similar período del año pasado. Los asesinatos en Filadelfia han aumentado un 27% este año y en Minneapolis un 94%, en relación a 2019.

En Chicago, 414 personas han sido asesinadas este año, un incremento del 50% en comparación a 2019. Se les ha disparado a más de 1900 personas en aquella ciudad. Solamente el 21 de julio, se les disparó a 23 personas, incluyendo a 15 que estaban en el exterior de una casa funeraria. El fin de semana antepasado, 63 personas experimentaron una situación similar con armas de fuego, muriendo por lo menos 12 de ellas. El 4 de julio, 80 personas fueron objeto de disparos, 17 murieron. En el día del Padre, 104 personas recibieron disparos, 15 murieron, incluyendo cinco niños pequeños. El último fin de semana de mayo, en Chicago se produjeron 18 asesinatos en 24 horas, el día más letal en la historia de la ciudad.

En Portland, tres policías federales han quedado ciegos de manera permanente a causa de los lásers utilizados por los protestantes. En otras ciudades, los policías han estado siendo emboscados al atender llamadas de ayuda.

El procurador general William Barr, por su parte, anotó además que la principal causa de muerte en personas jóvenes negras es el homicidio. Cada año, aproximadamente 7500 negros estadounidenses mueren víctimas de homicidios y Barr enfatiza que cada una de esas vidas es de gran importancia. 

La respuesta a la situación descrita en la Operación LeGend, nombrada así en homenaje a LeGend Taliferro, un niño de cuatro años que murió a causa de un disparo mientras dormía el 29 de junio pasado en Kansas City, ciudad en la que se han registrado 100 homicidios este año, un aumento del 40% sobre 2019.

Protestas en el centro de la ciudad de Portland, Oregon, en la madrugada del 26 de julio. Foto: Departamento de Policía de Portland

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