EEUU identifica cerca de 300 riesgos para su base industrial de la Defensa
– Reporte inédito sobre la industria de la defensa local
– Compra del S-400 por India bajo evaluación
maquina-de-combate.com – En un reporte elaborado por especialistas de los Departamentos de Defensa, Comercio, Trabajo, Energía, Seguridad Interna y otras agencias, el gobierno de EEUU ha identificado alrededor de 300 riesgos que enfrenta la base industrial de la defensa del país norteamericano.
El reporte ha sido entregado a la Casa Blanca el pasado 5 de octubre.
Uno de los principales objetivos de la administración que encabeza el presidente Donald Trump es el fortalecimiento de la base industrial de la Defensa de Estados Unidos, esa inmensa cadena de empresas con residencia fiscal en el gigante norteamericano que a la par que generan miles de puestos de trabajo y miles de millones de dólares en ingresos, promueven actividades de investigación y desarrollo en prácticamente todos los segmentos de la Defensa, aire, mar, debajo del mar, tierra y espacio, para preservar lo que las autoridades políticas de EEUU consideran como la superioridad tecnológica de sus fuerzas armadas. Esa superioridad tecnológica que en cierta medida es transmitida a sus países aliados y en menor medida a los países que son considerados socios.
El reporte entregado fue solicitado en julio pasado por el propio presidente Trump.
Según informó maquina-de-combate.com hace unos días, las notificaciones de venta de sistemas de armas y equipos militares en Estados Unidos se han incrementado en 40.58% entre enero y septiembre del presente año. Asimismo, en medio de una denominada guerra comercial con China, el gobierno de EEUU ha establecido sanciones al gobierno de China por la incorporación de cazas pesados Su-35 y la recepción de elementos componentes de una batería de defensa anti-aérea S-400.
La India ha adquirido días atrás un número de baterías S-400 en un contrato valorizado extraoficialmente en alrededor de 5,000 millones de dólares. En reciente conferencia de prensa en la Casa Blanca, el presidente Trump ha sugerido que su despacho analiza tal adquisición y que se puede esperar pronto una reacción del gobierno estadounidense, sea en la forma de una dispensa o a través de alguna sanción a la India. El gobierno de la India es uno de los principales importadores de armamentos en el mundo y un cliente muy importante para la industria de la defensa estadounidense.
Cabe indicar que Turquía, miembro de la OTAN, también ha adquirido el sistema S-400, lo que ha provocado gran controversia en EEUU, donde algunos políticos han recomendado suspender la entrega de cazas furtivos F-35 a la Fuerza Aérea de Turquía, habida cuenta que la base de datos de las futuras baterías S-400 turcas tendrán que recibir datos de los cazas furtivos para evitar la posibilidad de fuego amigo, lo que representa un riesgo de seguridad para EEUU.
El gobierno de EEUU está implementando programas para el incremento de la inversión directa en su base industrial de la defensa, intentando solucionar cuellos de botella, fallas en la cadena de suministros y establecer redundancias que aseguren el flujo adecuado de materiales, equipos y sistemas de armas a los institutos armados estadounidenses y hacia el mercado de exportación.
También se intenta promover la capacitación de la mano de obra especializada y fortalecer el trabajo conjunto con entidades de otros países – aliados y socios – para atender los retos que se presentan ante la base industrial.
El reporte entregado el 5 de octubre de 2018 fue preparado por más de 300 especialistas y el trabajo conjunto de varias entidades gubernamentales fue liderado por el Departamento de Defensa de EEUU. El documento es considerado por la Casa Blanca como una evaluación sin precedentes de la base industrial de la defensa local, incluyendo sectores tan tradicionales como la construcción naval, aeroespacial, vehículos blindados, capacidades de la fuerza de trabajo, entre otros.
En diciembre de 2017, el gobierno de EEUU promulgó su renovada Estrategia de Seguridad Nacional, en la que se resalta la importancia de la base industrial como elemento crítico del poder de Estados Unidos. Asimismo, el presidente Trump ha establecido aranceles a las importaciones de aluminio y acero en un esfuerzo por proteger a la industria local en dichos sectores, la cual se considera también muy importante para la seguridad nacional.
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