Conferencia «La esperanza de nuestro bicentenario: La Vacuna Peruana»
Presenciada virtualmente por 188 mil personas
maquina-de-combate.com – La Mancomunidad Regional de Los Andes ha llevado a cao el 2 de marzo la conferencia virtual denominada «La esperanza de nuestro bicentenario: La Vacuna Peruana» en la que especialistas han informado al detalle el proceso de desarrollo de la Vacuna Peruana y el estado actual del proyecto de investigación, desarrollo y manufactura.
La Mancomunidad Regional de Los Andes está conformada por los gobiernos regionales de Apurímac, Ayacucho, Huancavelica, Ica, Cusco y Junín.
El evento fue auspiciado por el presidente de la Comisión Ejecutiva de la Mancomunidad Regional de Los Andes y actual gobernador regional de Ica, Javier Gallego Barrientos. El moderador ha sido el Dr. Roberto Accinelli, investigador de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH).
Entre otros expositores o panelistas, participaron el Dr. Manolo Fernández, gerente general y fundador del laboratorio Farvet y el Dr. Mirko Zimic, jefe del Laboratorio de BioInformática de la UPCH.
Al tomar la palabra, el gobernador regional Javier Gallego informó que se la solicitado al gobierno central la autorización para que las autoridades regionales, locales y el sector privado puedan adquirir vacunas contra el nuevo coronavirus. Haciendo referencia a las recientes y muy pero muy controvertidas declaraciones del presidente transitorio Francisco Sagasti sobre que no es su intención que las personas con plata se vacunen y las que no tienen no, el gobernador Gallego señaló que ha no coincide con ese punto de vista y que ha conversado con personas humildes afectadas por este virus, quienes le indicaron que muchos de ellos gastan unos 3000 soles en la compra de un balón de oxígeno y que para atender a sus familiares enfermos necesitan de cinco a seis balones. Las personas están gastando entre diez y 15 mil soles.
En cambio, para la compra de vacunas, las importadas, las autoridades gastarían entre diez y 30 dólares, agregó Gallego. Es importante apoyar a las empresas privadas, pero no solamente a las extranjeras, sino también a las locales, como es el caso de Farvet, empresa chinchana a la que esperan apoyar en el desarrollo de la vacuna.
Sobre la Ivermectina, Gallego comentó que desde abril de 2020 tuvieron conocimiento de este medicamento, el cual aplicaron a pacientes pero que la Defensoría del Pueblo los denunció porque el medicamento no estaba autorizado por el gobierno central. A pesar de ello, han seguido trabajando y han podido contener el virus a nivel regional, sostuvo Gallego. Anotando que no es doctor, agregó que la Ivermectina protege para que el virus no ingrese al núcleo de las células, evita su reproducción y reduce la carga viral.
Finalmente, le volvió a solicitar al gobierno centra a que le de una mirada a las empresas peruanas que se están esforzando en brindar soluciones efectivas contra la pandemia.
El moderador, Dr. Accinelli, comentó que la solución esperada para la pandemia son las vacunas y que se están aplicando diversas estrategias en el desarrollo de vacunas, pero siempre buscando seguridad, efectividad y protección. Agregó que se considera que solamente las grandes potencias que financian a sus científicos , las que tienen suficiente número de investigadores para desarrollar las vacunas. Es una interrogante si un país como el Perú pueda desarrollar su propia vacuna y se espera responderla en esta conferencia, aunque tiene la convicción de que la respuesta es positiva.
En su turno, el Dr. Manolo Fernández confirmó primero la finalización de los ensayos pre-clínicos, realizados en animales, con resultados más positivos de lo que esperaban. La investigación de desarrollo de la denominada Vacuna Peruana lleva ya más de un año, habiendo iniciado en enero 2020, y concluyendo la fase preclínica hace un mes aproximadamente.
El equipo investigador de Farvet son en su mayoría jóvenes peruanos que no superan los 30 años de edad. Más de 30 biólogos moleculares, consultores extranjeros e instituciones como el Instituto Nacional de Salud (proporcionó el virus, pruebas); Concytec, que construyó y suministró un módulo de nivel 3 en un contenedor para el desarrollo de las pruebas de desafío, la UPCH aportando a sus estudiantes, la Universidad San Luiz Gonzaga de Ica (de donde provienen varios investigadores, incluyendo los dos jóvenes doctores que diseñaron y desarrollaron la vacuna. Ambos tienen estudios en Londres).
Fernández considera el desarrollo de la Vacuna Peruana como el proyecto más importante de investigación científica que se haya llevado a cabo en el Perú en los últimos años. La vacuna tiene una gran sinergia con varias vacunas, especialmente aquellas que se han desarrollado a partir de vectores virales como el Adenovirus, siendo tal el caso de la vacuna de AstraZeneca o la vacuna rusa (Sputnik V) o también la vacuna de Sinopharm (la vacuna más cara del mercado, por cierto), que es una vacuna inactivada. La Vacuna Peruana potencia a ambas por su sinergismo, pudiendo fortalecer la capacidad inmunogénica de cualquiera de estas vacunas.
El Dr. Mirko Zimic resaltó que a pesar de las limitaciones, los investigadores peruanos no perdieron la esperanza de alcanzar el gran hito para la medicina peruana al desarrollar una vacuna de este tipo en tan corto tiempo. Zimic tiene la convicción que el equipo ha dado un paso muy importante para alcanzar el resultado esperado, una vacuna efectiva, económica, flexible y rápida de producir para salvar miles de vidas y salvar al Perú de una catástrofe económica a la cual el país se está dirigiendo.
Zimic, además de catedrático e investigador de la UPCH es consultor científico de Farvet desde hace ocho años.
Nuestros gobiernos no han sabido confiar en los investigadores peruanos, indica Zimic, prefiriendo importar soluciones. Es momento para cambiar esa historia. Ya se han desarrollado ventiladores mecánicos, pruebas de diagnóstico, plantas de oxígeno (que el gobierno no compra), kits de apoyo a la respiración, hasta una potencial vacuna, sin gran apoyo del gobierno de turno, salvo Concytec.
A continuación procedió a compartir los resultados al diseño, desarrollo y evaluación en animales de la Vacuna Peruana.
La Vacuna Peruana es una vacuna vectorizada en el virus de Newcastle, su formulación fue la última opción que tuvieron los especialistas en la investigación que llevaban a cabo desde enero 2020. Empezaron buscando una vacuna clásica, de proteína recombinante (de material genético modificado).
Los ensayos pre-clínicos concluyeron hace un mes con la prueba de desafío, en la cual se utilizaron hamsters, que fueron inmunizados y se les enfrentó al virus para poder apreciar el efecto de la vacuna. La eficacia biológica de esta vacuna resultó favorable, pero para las condiciones que tenemos en Perú su producción es costosa. Se buscó una opción competitiva. Es entre junio y julio 2020, al ver los resultados se decidió cambiar el rumbo, probando con una vacuna oral, basada en la bacteria Salmonella. Esta vacuna mostró tener una importante respuesta celular pero una muy modesta de anticuerpos.
Hacia fines de agosto se decidió cambiar para probar una vacuna nasal, basada en un virus de aves, pollos, conocido como Newcastle. Zimic reconoce que casi como un milagro, ya que venían de dos fracasos más bien logísticos en el caso de la vacuna recombinante. La vacuna nasal empezó a mostrar los mejores resultados. Los resultados positivos seguían uno tras otro. Y ya con la última prueba, la prueba del desafío, que empezó el 26 de diciembre y terminó el 5 de enero, se confirmaron las bondades de la vacuna nasal.
Los investigadores están remitiendo una publicación científica a una revista de alto impacto y que será colocada como pre-print en el medio bioarchive (bioRxiv).
El virus Newcastle afecta a aves, no hay un patógeno homólogo en humanos, no hay un virus equivalente que infecte y cause enfermedad en humanos. Zimic resalta que esa es una ventaja muy importante. La variante de Newcastle utilizada es un virus lentogénico no virulento porque en las aves no genera enfermedad fuerte. Es un virus reconocido como oncolítico, tiene capacidad para destruir células tumorales y no células sanas. Hay un estudio actualmente en Fase II de ensayos clínicos con pacientes que sufren de cáncer y reciben el Newcastle vía intravenosa en concentraciones 100 veces más altas de las que se usan en la Vacuna Peruana y además en el estudio usan cepas mesogénicas, más virulentas.
Para el desarrollo de la Vacuna Peruana, se ha modificado el genoma del virus Newcastle, insertando un gen para conseguir que en la superficie del Newcastle se exprese una proteína que no era parte de este virus. La proteína Spike (Pico) del SARS-CoV-2.
Hasta noviembre del año pasado, se pensaba que las vacunas serían una solución universal para el SARS-CoV-2. Los programas de investigación buscaban evitar que la proteína pico se enlace al receptor ACE2 de las células humanas, que le sirve de puerta de ingreso. Las investigaciones asumían que la forma de conexión entre el virus y células permanecería igual. Sin embargo a proteína Spike (Pico) del SARS-CoV-2 venía ya mutando, cambiando la estructura y afinidad, la manera en que el virus se une al receptor de la célula humana. Las mutaciones detectadas en noviembre pasado, hacían que el enlace con el receptor sea mucho más fuerte, provocando variantes más virulentas, aumentando la carga viral significativamente. Ello se vio en las variantes inglesas y sudafricanas, más contagiosas.
A fines de diciembre, las mutaciones tenían un efecto más serio. Los anticuerpos ya no actuaban con la misma eficiencia ante el virus mutado. La afinidad de los anticuerpos neutralizantes que se habían generado hasta ese punto, que protegían contra la cepa original, ya no podían bloquear una cepa mutada, generando una resistencia a la respuesta inmune.
Las vacunas desarrolladas contra la cepa original, inducen anticuerpos que ya no son tan efectivos contra cepas mutadas. Y el SARS-CoV-2 sigue mutando.
Se necesitan sistemas de vigilancia epidemiológica para detectar nuevas cepas y establecer sistemas de alerta temprana.
En este punto, la Vacuna Peruana basada en el Newcastle tiene una gran ventaja frente a las otras vacunas. Puede actualizarse en 30 á 45 días para cargar un gen modificado que produzca una proteína actualizada en línea con la cepa circulante en ese momento. El equipo de Farvet ya desarrolla las variantes de la Vacuna Peruana (candidato) para enfrentar las cepas inglesa, sudafricana y brasilera. Ese proceso se puede repetir conforme aparezcan nuevas cepas.
Farvet tiene un constructo del virus Newcastle, patentado, desde hace seis años, sobre el cual se ha trabajado la vacuna candidato. Farvet llegó a probar seis variantes, con seis antígenos diferentes del SARS-CoV-2, que fueron reducidos a dos., una variante que insertaba la proteína S1 del virus (la que finalmente fue seleccionada) y otra que insertaba la proteína llamada RBD.
La Vacuna Peruana, liofilizada, puede permanecer estable a -8°C durante meses.
Falta el apoyo del gobierno peruano y el sector privado para desarrollar los ensayos clínicos.
Fuente: https://www.facebook.com/mrlda.peru/videos/760429551518882/?_rdc=1&_rdr , Conferencia «La esperanza de nuestro bicentenario: La Vacuna Peruana», Mancomunidad Regional de Los Andes