Representación digital del satélite de observación terrestre PeruSat-1. Foto: Airbus

maquina-de-combate.com – Aunque tanto los satélites de observación terrestre como los satélites meteorológicos se utilizan para recopilar información sobre la Tierra desde el espacio, hay algunas diferencias clave entre ellos.

Los satélites de observación terrestre, como el PerúSAT-1, se utilizan para tomar imágenes de la superficie terrestre, lo que puede ser útil en una variedad de aplicaciones. Estos satélites suelen tener cámaras de alta resolución que pueden tomar imágenes detalladas de la superficie terrestre, lo que es útil para la monitorización de la vegetación, la detección de cambios en el terreno, la observación de fenómenos naturales como terremotos y la detección de actividades humanas como la minería ilegal y la tala de bosques. Además, estos satélites pueden recopilar otros tipos de datos, como datos sobre la calidad del aire y los recursos hídricos.

Por otro lado, los satélites meteorológicos se utilizan para observar el clima y el tiempo en tiempo real. Estos satélites se utilizan para medir variables atmosféricas, como la temperatura, la humedad, la presión y la velocidad del viento, así como para tomar imágenes de las nubes y otros fenómenos meteorológicos. La información recopilada por estos satélites se utiliza para predecir el clima y el tiempo en todo el mundo, lo que es útil para una variedad de aplicaciones, desde la agricultura hasta la aviación.

En términos de diseño, los satélites de observación terrestre y los satélites meteorológicos pueden ser similares en algunos aspectos, como el tipo de órbita que utilizan y la forma en que se comunican con la Tierra. Sin embargo, los satélites meteorológicos suelen tener una mayor capacidad para recopilar datos en tiempo real, mientras que los satélites de observación terrestre pueden estar diseñados para tomar imágenes más detalladas de la superficie terrestre.

En resumen, los satélites de observación terrestre se utilizan para tomar imágenes de alta resolución de la superficie terrestre, mientras que los satélites meteorológicos se utilizan para medir variables atmosféricas y predecir el clima y el tiempo en todo el mundo. Ambos tipos de satélites son útiles para una variedad de aplicaciones y juegan un papel importante en la observación de la Tierra desde el espacio.

Diferencias de costo del PerúSAT-1 y un satélite GOES
El costo de un satélite puede variar ampliamente en función de una serie de factores, como la complejidad del diseño, la tecnología utilizada, la cantidad de tiempo y recursos dedicados a su construcción y lanzamiento, entre otros. En el caso del satélite PerúSAT-1 y los satélites GOES, hay algunas diferencias clave en términos de costos.

El satélite PerúSAT-1 fue desarrollado por la empresa francesa Airbus Defence and Space en colaboración con la empresa peruana de telecomunicaciones Entel. El costo total del satélite se estima en alrededor de 200 millones de dólares, incluyendo el diseño, la construcción, el lanzamiento y la operación.

Por otro lado, los satélites GOES (Sistema de Satélites de Observación de la Tierra Geostacionarios) son una serie de satélites meteorológicos operados por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos. El costo de cada satélite GOES varía según su generación y el número de satélites en la serie. Por ejemplo, el último satélite GOES-17, lanzado en 2018, se estima que tuvo un costo total de alrededor de 11.3 mil millones de dólares, incluyendo el diseño, la construcción, el lanzamiento y la operación.

Es importante tener en cuenta que los satélites GOES son satélites meteorológicos altamente sofisticados, que incluyen una amplia gama de sensores y tecnologías avanzadas para recopilar información sobre el clima y el tiempo. Además, estos satélites tienen una vida útil más larga que la mayoría de los satélites de observación terrestre, lo que significa que pueden ser más costosos de construir y mantener a largo plazo.

En resumen, el costo del satélite PerúSAT-1 es significativamente menor que el costo de los satélites GOES, aunque esto se debe en parte a las diferencias en la complejidad del diseño y las capacidades tecnológicas. Cada satélite tiene un propósito diferente y su costo está justificado por su capacidad para cumplir con los requisitos específicos de su misión.

Gráfico digital de un satélite GOES-N, serie de tres satélites: GOES-13 (inactivo), GOES-14 (almacenado en órbita) y GOES-15 (almacenado en órbita). La red GOES continúa operando con otros satélites. Foto: NASA

Fuente: ChatGPT (sin editar, tal cual)